y me dejas otra vez esperando
a que llueva sal de mar.
y me dejas esperando
a que brote el pasto verde.
y me he quedado esperando,
un abrazo y un susurro.
nunca me falto que me
señalarlas por donde.
pero nunca pensé que fuera
a ser para ti como un hermano.
pues un hermano no se acerca
con intenciones necias.